El próximo 8 de abril se cumplirán 20 años del
hallazgo del cuerpo sin vida de Kurt Cobain. Cuando hallaron el cadáver del maestro
del grunge también encontraron una nota de despedida dirigida a su mujer,
Courtney Love, y a su hija de por entonces año y medio, Frances Bean. Ésta
terminaba con un verso del tema de Neil Young ‘Hey Hey, My My (Into the Black).
El músico norteamericano se ciñó al mensaje de esta canción hasta terminar con
su corta vida y, por ende, con sus gloriosos cinco años de carrera musical.
En estos productivos cinco años, Cobain convirtió a Nirvana
en el último grupo musical de impacto sociocultural a nivel internacional y, a
pesar de su muerte en 1994, Kurt sigue estando presente en los corazones de
millones de fans de todo el mundo.
“Lo
tengo todo, todo. Y estoy agradecido, pero desde los siete años odio a todos
los humanos en general... Sólo porque a la gente le resulta fácil relacionarse
y tener empatía. Sólo porque amo y compadezco demasiado a la gente. Gracias a
todos desde lo más profundo de mi estómago nauseabundo y ardiente por vuestras
cartas y vuestro interés durante los últimos años. Soy una criatura voluble y
errática. Se me ha acabado la pasión y, os recuerdo, es mejor arder que
apagarse lentamente”.
Estas
palabras definen a un hombre que vivió mucho en poco tiempo. Probablemente en
su cabeza no residía un concepto de la vida que por extensión global se
considera normal. Quizá por ello se convirtió en mito. Quizá por ello, 20 años
después de su fallecimiento, su música e influencia sigue estando vigente. Las
generaciones viven de sucesos y personas relevantes que con su inspiración
marcan a una sociedad. La muerte de la estrella del grunge es uno de los
momentos con los que finaliza una etapa de la historia, como el asesinato de
John Lennon o el de JFK.
La
repercusión de su suicidio fue tal que muchas personas fueron y son escépticas
a este suceso. Por ejemplo, el detective Tom Grant hablaba de asesinato.
Existen muchas teorías conspiratorias que ni mucho menos se pueden descartar.
La más sonada sin duda es la relacionada con su mujer, a la que numerosas
fuentes achacan la culpa de su muerte. Pero, hasta la fecha, según las fuentes
Kurt se suicidó con una escopeta.
Sea
como fuere, los últimos meses de la vida de Cobain estuvieron marcados por dos
sentimientos: soledad y evasión. Las drogas hicieron el resto. ¿Por qué todos
los grandes músicos acaban metidos hasta el cuello de estupefacientes? El caso
es que un día como hoy de 1994, el cerebro de Kurt estaría volando en un mundo
ajeno sin recuperar la escandalosa sobredosis que sufrió en Roma el 4 de marzo.
El rohypnol y el alcohol fueron sus últimos compañeros de viaje. Courtney
siempre explicó que la sobredosis de Roma fue un intento de suicidio más, de
hecho, el comportamiento del cantante de sus últimos meses estaba centrado en
quitarse la vida y eso es lo que su mujer siempre declaró.
El
último concierto de Nirvana, el 1 de marzo de 1994 en Múnich, es recordado no solamente
por ser el último sino porque se acabó mucho antes de lo previsto a causa del
agotamiento mental y físico de su líder. En los conciertos de Madrid y
Barcelona del 8 y 9 de febrero respectivamente ya se contagiaba entre los
presentes una nostalgia de pensamientos confusos en torno a una cuestión:
¿cuánto le quedará de vida?
En la película ‘Last Days’ (2005), el cineasta estadounidense
Gus Van Sant intentó plasmar los últimos días de la estrella, si lo consiguió
depende de cada crítico. Lo que está claro y, a pesar de que el protagonista se
llamara Blake y que las canciones que tocaba no eran las del grupo, se recreó perfectamente
el ambiente que rodeó a Cobain, esto es, un completo aislamiento en una mansión
visitada tan sólo por el niñero de su hija, ‘Cali’ DeWitt y Rene Navarette con
quien compartía viajes tóxicos de heroína.
Heroína, sí, entre otras muchas sustancias nocivas,
sirve hoy en día para comprender el porqué de Nirvana y, generalizando, lo que
es el grunge. El propio Kurt comentó en varias ocasiones que consumía todos los
días y que había comenzado su coqueteo con las drogas cuando se veía
indispuesto del estómago. La escabrosa infancia que el músico sufrió, con el
divorcio de sus padres y la vida inusual de éstos cuando apenas tenía siete
años inició claramente su particular camino hacia la perdición. Su pensamiento
estaba enfocado al aislamiento del mundo y de la gente en general y así, algún
día de principios de abril escribió su nota de despedida. Antes de su firma
escribió: “PAZ, AMOR Y EMPATÍA” y a continuación se despidió de su mujer y de
su hija: “Frances y Courtney, estaré en vuestro altar. Por favor, Courtney,
sigue adelante. Por Frances, por su vida, que será mucho más feliz sin mí. ¡Os
quiero! ¡Os quiero!”.
Cuando terminó de escribir estas palabras, agarró
una escopeta y se disparó.Tras el suceso, las noticias variaban de un día a
otro y no se hablaba de otra cosa. Los homenajes se hicieron multitudinarios y
es por ello por lo que hoy, con artículos como este, se sigue homenajeando al
gran Kurt Cobain.